Témpano

Formación

Pedro Castillo Guitarra & Voces
Julio César Della Noche Piano Eléctrico & Teclados
Miguel Angel Echevarreneta Bajo y Guitarras Acústicas
Gerardo Ubieda Batería y Percusión

Ex Miembros

Zdenek Matousek Voces (1981-1986)
Alexis Peña Voces (1987-1990)
Iker Gastaminza Teclados (1980-1990)
José Ignacio Martín Teclados (1987-1990)
Victor Fiol Bajo (1981-1985)
Ruben Angel Correa Micho Guitarra (1983)
Richard Popovich Guitarra(1984)
Francisco Morales Guitarra (1987-1990)

Introducción

¿Han visto alguna vez a esta banda en fotos? ¿No? ¡Pues entonces sube un poco la página y verás una! ¿¡Listo?! Muy bien, entonces podemos seguir. En fin, a lo que quiero ir es que los tipos parecen CUALQUIER COSA menos una banda de rock. ¿Panas cuarentones que van a un partido Caracas-Magallanes? ¿Estudiantes de Ingeniería de la Universidad Católica Andrés Bello?? ¿Dependientes de una tienda de artículos de computación? ¿Profesores de Ingles del Centro Venezolano Americano ? Todo eso podría creerlo, pero nunca se me ocurriría que tales novelescos personajes fueran una BANDA DE ROCK!!! Sin embargo, sí son una banda de rock, y de las buenas. Aquella que, en honor a aquellas enormes islas de hielo flotantes que deambulan en el Polo Norte, se ha dado en llamar Témpano.

Se la suele considerar una más dentro del movimiento del rock progresivo, junto a monstruos como Aditus, Vytas Brenner, etc. No obstante, esto se trata de una burda, vulgar e insensata simplificación. Tempáno, siendo sinceros, no se puede encasillar en ningún lado: están las bandas de hard-rock, las bandas de prog-rock, las bandas de metal, las bandas de punk, las bandas de blues-rock, las bandas de pop-rock y… tambien está Témpano. Fuera de todo eso y a la vez abarcándolo todo. Bueno, tampoco se vayan a creer que se trata del grupo más versátil y variado de la historia, no, pero su sonido y su estilo ciertamente no tienen imitación ni símil alguno: son una banda ÚNICA, nadie puede parecerse a ellos; nadie más fue, ni es, ni será como el viejo y querido Témpano.

¿Y a qué se debe esta singularidad? A un poco de todo. La banda tiene a un baterista muy, muy, muy, MUUUUY talentoso llamado Gerardo Ubieda. Sin desemerecer a los fantásticos instrumentistas que han contribuido con el grupo, decir Témpano es casi lo mismo que decir Gerardo Ubieda. Él componía las canciones, él escribía las letras y eran su visión artística, sus ambiciones, sus fantasías mentales las que fueron guiando al grupo por distintos derroteros musicales a lo largo de sus 30 años de historia. Siempre en un segundo plano sentado en la silla giratoria mientras aporrea sus tambores . Pero claro; Parte de la fama le han dado los distintos cantantes que también desfilaron en sus filas: Pedro Castillo (Que estuvo un buen tiempo en la archiconocida Aditus y en PP’S tocando la guitarra) fue el primero de ellos con el que grabó el célebre Atabal Yemal en 1979, en su etapa progresiva (Que después fue reeditado en 1998 por una discográfica francesa con temas nuevos), luego fué Zdenek Matousek que grabó tres discos en la etapa mas contestataria de Témpano (1981-1984) En donde salió el célebre tema Esequibo y por último Alexis Peña -el mas conocido- en la etapa mas comercial y conocida del grupo en que versionan temas pop americanos que luego desembocan en un grupo de nombre Poster y también está la música. Definir la música de Tempáno en pocas líneas es poco menos que una quimera, pero debo intentarlo. Como dije antes, tienen un sonido especial, diferente y clásico; las ambiciones compositivas de Témpano dieron como fruto una aleación inimitable de progresivo, jazz, hard-rock, música clásica y pop comercial y radiable, recubierta por estilísticas medievales y ancestrales que le otorgan un espíritu añejo y pintoresco a todo ello. A través de este formidable hilo conductor, la banda se ha movido en diferentes direcciones a lo largo de su carrera.

Dentro de este sonido especial, tan único, tan de ellos que logró la inspiradora tutela de Ubieda (El único integrante original de la banda que resistió todos los cambios),Témpano tiene para todos los gustos. ¿Te gustan las buenas melodías? Témpano tiene algunas de las más increíbles melodías del rock, tanto vocales como de piano, teclados, sintetizadores o guitarra. ¿Quieres rockear y sudar un poco? Témpano ocasionalmente se animaba a rockear duro, retumbante, crudo y pesado, con algunos riffs de antología mundial, ofreciendo harta competencia a monstruos del hard rock como La Misma Gente, Arkangel, Zapato 3 o Sentimiento Muerto. ¿Te gusta algo más relajado, o acústico? Témpano otorga algunas brillantes baladas acústicas y orquestadas que te harán derretir. ¿Eres de esos que se vuelven locos con los trucos complejos y los virtuosismos ostentosos? En su pico progresivo, Témpano era capaz de los más intrincados, laberínticos y vuela-cerebros pasajes de música jamás concebidos. En fin, todo. Y lo mejor es que estas distintas facetas no necesariamente aparecían por separado: en una misma canción podían meter todas estas cosas juntas y hacerlas funcionar. El Esequibo, por ejemplo, rockea a full con una letra 100% contestataria que haría palidecer a grupos como Sentimiento Muerto, pero también provee una melodía muy pegadiza y solos de teclado… ¿Se imaginan eso en otro grupo? Difícil ¿No?

Si tenemos que hacer una demarcación temporal de los estilos que han predominado a lo largo de su discografía, ésta sería más o menos así Tempano tiene tan solo un disco que pueden considerarse progresivo en el sentido más terminante de la palabra Atabal Yemal (Que como ya dije, fue su debut y lo reeditaron 19 años después) Pesadilla Sin Final, En Reclamación y Seducción Subliminal, tres discos en el mas puro estilo estilo new-wave 80tero con letras full contestatarias y pinceladas progresivas, luego vienen Tempano 1987 y el Cuarto Lado en la onda pop-radiable-romántica-versionera-de-temas-de-pop-americanos que desembocó después en grupo-secuela de nombre Póster tras la salida de Gerardo Ubieda  (eje principal del grupo) del grupo y la última tras la redición del debut Atabal Yemal por la casa discográfica francesa Musea en 1998 el line-up original de ese disco se reunifica y graban dos discos mas en la onda progresiva: Childhood’s End (El Fin de la Infancia) y The Agony & the Ecstasy (La Agonía y el Extásis) mas uno mas que viene en camino de título tentativo The whisper of the Blade.

En fin Témpano es una de las bandas mas queridas e infravaloradas de la escena musical venezolana que supo sortear las tendencias musicales del momento; y morir y resurgir como el ave fénix de sus cenizas. Un Témpano que jamás se derrite.

PESADILLA SIN FINAL – 1981

«Si un refresco busco yo, me traen una… cerveza»

1) Por Siempre, 2) Cosas que Pienso y No Quiero Pensar, 3) Quedamos, 4) Señora de La Madrugada, 5) El Helado (Drama Cotidiano), 6) Pesadilla Sin Final, 7) No Voy a Volver, 7) Es Absurdo, 8 ) Al Bailar, 9) Arabesca, 10) Adios

Mejor Tema El Helado (Drama Cotidiano)

A comienzos de la década de los ochenta, un camino confiable hacia el éxito para cualquier banda era tocar new-wave. El pleno auge de PP’S grabando sus placas más ambiciosas; Aditus adoptó el estilo con Fuera de Ley y Posición Adelantada; despierta el 1×1 del Viernes Negro con precursores como Colina, Yordano  con su grupo Sietecueros, Franco de Vita con su grupo Icaro; Ilan con su grupo Melao, la explosiva aparición del grupo del corazón tachado cuyo nombre deriva del inglés de Dead Feeling; el notorio surgimiento de Soda Stereo en tierras porteñas, y un Frank Quintero dejando su estilo jazz-funk para hacer discos mas comerciales y ambiciosos sin perder calidad, sintetizan con elocuencia las tendencias del momento. Aquellos fueron años para ese sonido pegajoso ajustado, bailable y simplón; ese sonido clásico de ondulantes bajos, teclados juguetones y canciones cortas que parecía ser un antídoto necesario para los excesos proggies y sinfónicos, , así como el legado para combatir otros excesos, los metálicos,  propios de los ochenta encabezados por Arkangel y Resistencia y así como para descansar de la resaca de la infausta música disco, aquella banda sonora de la entonces llamada Venezuela Saudita.

Después de aquel Atabal Yemal, dejan aquellos viajes épicos de olas con Virginia Woolf, anhelos, presencias y ausencias para enmarcarse en un estilo mas callejero y acorde con los tiempos. la jugada de estos era, adaptarse en el mercado musical pero dejando algo de su estilo prog. en algunos temas causando una pesadilla infinita (Como lo dice el título del disco).

Pero esto no tiene nada de malo. En cierta forma, hacer un álbum de new -wave era el test de rigor para la época: si lo lograbas ganabas status, sabías que podrías hacer el resto. Témpano lo hace y lo hace muy bien pero Ubieda y Gastaminza todavía no ostentan el máximo de su potencial aquí (los sonidos de Tempano 87 y El Tercer Lado se cagarían de las risa si se encontraran con estos), pero la intención está y aporta una frescura distintiva que suena tan válida hoy como seguramente lo hizo en su momento. Pesadilla sin Final suena como un álbum de jazz-rock-pop genérico, sólido, agradable, cálido, más jazzero que proggie (de hecho, no es NADA proggie), eléctrico (ni una guitarra acústica) y salpicado de teclados saltarines que, no obstante, deberían satisfacer a los amantes del rock más clásico de la misma forma que me satisfacen a mí. Si te gusta el jazz, te gusta Pesadilla…, tan sencilla ecuación como esa.

Arrancamos de manera sobria con Por Siempre un tema medio acid-jazz que podría haber sido de los Amigos Invisibles y Zdenek imitando a medias a un cantante de joropo. Cosas que Pienso y no Quiero Pensar comienza con una guitarra semi-proggie para dar a paso una batería discreta y una guitarra procesada con Zdenek cantando sobre una épica de esclavos y amos con coros como Despertar de ese sueña y dejar nuestro cuerpos… Quedamos suena algo animadita con su teclado juguetón. Señora de la Madrugada podría mostrar que será la etapa romanticona de Témpano con con su letra muy melancólica en donde Zdenek ruega el amor desesperado a una prostituta con su melancólica linea de guitarra y bajo que sugieren nocturnidad .

Pero el momento estelar es para El Helado, con una letra que parece un jingle publicitario de Tío Rico anunciando cosas como fresa, mantecado, lluvia de chocolate, llevar la novia a patinar, etc. Excelente para animar uno de esos comerciales de la conocida marca de helados con la famosa Laura La Sin Par de Caurimare protagonizando.

Pesadilla sin Final (La pista titular) es medio jazzosa-progresiva con teclado de calipso, con una letra metafórica con cosas como bosque de ladrillo, ríos de asfalto, paz y violencia en mi cuidad, etc. No Voy a Volver es medio melancólica con sus trabajos de teclados. Es Absurdo es casi espacial con su teclado. Al Bailar tiene el mejor solo de batería 80tera muy PP’S con cambios de ritmo. Arabesca tiene un teclado muy new-age y cerramos con Adios muy aceleradita.

Una revisión aburrida ¿No creen? Pues es así: para discos aburridos, revisiones aburridas. Bah, no es en serio; Pesadilla… no es para nada aburrido: es un agradable y placentero disco de jazz-rock-pop que pinta los humildes inicios de una gran banda. Nada muy arriesgado ni ambicioso, claro está, pero bien hecho… y eso es lo que más importa.

…EN RECLAMACIÓN – 1983

«El Esequibo es mío, es tuyo, es tierra venezolanaaaaaa…»

1) Extranjero, 2) Abrazando El Viento, 3) Como Tu,  4) Amnesia de 5 en 5,  5) El Esequibo, 6) Tiempo Que Pasa y No Vuelve, 7) Noche Silenciosa, 8 ) En El Metro, 9) Sophia

Mejor tema: El Esequibo (Cual mas?)

Después de tantear en los territorios  con el estilo de new-wave  de Pesadilla Sin Final. Ubieda y Gastaminsa ya se animan a sacar de la galera todo tipo de influencias musicales y nos sorprende gratamente en este tercer álbum, …En Reclamación, una obra maestra. Para eso tuvieron gentilmente que prescindir de Miguel Angel Echevarreneta ya que, si bien se trataba de un gran guitarrista, su estilo tradicional y purista no se adaptó a las nuevas ideas y experimentos que los tempanos mayores Ubieda y Gastaminsa tenían en mente. En su lugar metieron a Ruben Angel Correa Micho. Que venía de tocar en un grupo de rock-disco y versiones llamado Tinajas en que militó un muchacha de origen peruano y raíces británicas, que después sería conocida por llenar varias veces el Poliedro de Caracas.

Volviendo al grano. Aquí dejan el miedo y se tornan mas contestatarios ofreciendo una gama de sonidos mas duros. Hay mas guitarras, mas batería y menos teclados.. Aquí parece que dejaron la pena y fueron a declamar su disconformidad con el mundo que los rodeaba.

Extranjero comienza con unos teclados ambientales para dar paso a una especie de melodía jazzeada con organos, Abrazando el Viento comienza con una bateía y una guitarra full 80teras, Como Tú, es otra balada de piano que antecede al estilo romanticón del Tempano de 1987, Amnesia de 5 en 5 empieza con una especie de murmullo de personas para dar paso a una teclado ochentero, una voz robótica y por ultimo una gra solo de Ruben Micho Correa.

Y llegamos a la madre de todas las canciones: El Esequibo, cada vez que la oigo, me transporto a los tiempos del Viernes Negro, de los excesos del Presidente de ese tiempo (Jaime Lusinchi), de los Juegos Panamericanos, etc. El canto es una oda hacia el reclamo de unas tierras que los ingleses nos arrebataron y aún nos pertenencen. Comienza con unos teclados juguetones para dar paso a la guitarra y batería y Zdenek cantando la 1º estrofa: Años de espera/por un pedazo de tierra/que desde que tenemos uso de razón/su cara aparece en los mapas… como añorando el territorio quitado Y así hasta llegar al primer coro Oiga señor/busque/su identificación/ para que se acuerde/de su condición/tras rejas/sin dueño/sin casasin nación… como alentando a la gente a reafirmar su nacionalidad y llegamos al coro principal El esequibo es mío, es tuyo,es tierra venezolanaaaaaaaaaaaaa . El esequibo es mío, es tuyo, es nuestro … finalizando con un gran solo de guitarra y un sonido como de disco rayado ¡CARAJO! nunca ví una letra rockear así, nunca verán a Tempáno volver rockear así de esa manera en sus siguientes discos.

Hacia la mitad del disco se va desinflando poco a poco. Tiempo que Pasa y no Vuelve comienza con un solo de batería y campanitas, Noche Silenciosa empiza con un teclado sinuoso y baterías jazzosas. En el Metro es una oda al recién inagurado Metro de Caracas comenzando con un sonido de teclado Major Tom y un innovador trabajo de guitarra. Sphia es la otra power-ballad del disco con piano y teclados new age.

Debo recalcar que en el 2002 hicieron una reedición de este disco. Aprovechando el furor de Atabal Yemal, reforzando aún mas el mito alrededor de este brillante trabajo. Es brillante. Con tal de que haya sembrado en tí, amigo lector, ganas de ir a comprártelo, o escucharlo otra vez en caso de que ya lo tengas, mi objetivo está cumplido y ya puedo descansar en paz.

SEDUCCIÓN SUBLIMINAL – 1984

«Solo soy un producto de consumo con una etiqueta atras…»

1)Zona Roja, 2)Sr. Burócrata, 3)Ahora o Nunca, 4)11:45, 5)Callao, 6)El Mundo En Un Botón, 7)Grita Una Vez Más, 8)Producto De Consumo, 9)Te Imaginé

Mejor Tema: Zona Roja, Producto de Consumo

CONTINUARÁ…